miércoles, 23 de septiembre de 2009

Hay sueños muy secretos,

Hay sueños muy secretos,
ni a revelarlos se atreverían las estrellas.
"No se cuenta el sueño que no existe,
la bendita memoria lo liquida,
y cuando el absurdo tienta el desafío,
de envilecer un recuerdo insoslayable,
la falsificación, de tan ilógica,
el cuerpo, al instante , la elimina.
Nunca se olvida un sueño que no existe,
mantiene su latencia de por vida,
no hace falta perseguirlo,
permanece."

Nuria Amat

lunes, 21 de septiembre de 2009

Éste es mi cuerpo

Me tocas con los ojos cuando lees
un suspiro, unas ganas en las sílabas
que traducen las sílabas del cuerpo.
Soy yo el que te acaricia, no las letras
que sólo son la senda que camino.
En este mismo instante te acaricio,
te beso con cuidado. Lentamente,
como en todos los comienzos, por los labios,
por la sed, por los ángulos del agua.
Soy yo. No es un poema. No es un verso.
Son mis manos. Trasladan su impaciencia
al desorden de un cuerpo en otro cuerpo.
Precisamente el orden más perfecto
es la aceleración que descompone
los poros y los abre, los asombra
con la urgencia de otros poros, los seduce
con la boca, los graba en los sentidos,
y luego los escribe y te acarician.
Soy yo. Mi sed, el hambre de un poema.


Juan Antonio González Iglesias

sábado, 19 de septiembre de 2009

poema 12... para mi corazón basta tu pecho...

Para mi corazón basta tu pecho,
para tu libertad bastan mis alas.
Desde mi boca llegará hasta el cielo
lo que estaba dormido sobre tu alma.

Es en ti la ilusión de cada día.
Llegas como el rocío a las corolas.
Socavas el horizonte con tu ausencia.
Eternamente en fuga como la ola.

He dicho que cantabas en el viento
como los pinos y como los mástiles.
Como ellos eres alta y taciturna.
Y entristeces de pronto, como un viaje.

Acogedora como un viejo camino.
Te pueblan ecos y voces nostálgicas.
Yo desperté y a veces emigran y huyen
pájaros que dormían en tu alma.

Pablo Neruda

jueves, 17 de septiembre de 2009

A TI SÓLO SE LLEGA

A ti sólo se llega
por ti. Te espero.

Yo sí que sé dónde estoy,
mi ciudad, la calle, el nombre
por el que todos me llaman.
Pero no sé dónde estuve
contigo.
Allí me llevaste tú.

¿Como
iba a aprender el camino
si yo no miraba a nada
más que a ti,
si el camino era tu andar,
y el final
fue cuando tú te paraste?
¿Que más podía haber ya
que tú ofrecida, mirándome?

Pero ahorae,
¡qué desterrado, qué ausente
es estar donde uno está!
Espero, pasan los trenes,
los azares, las miradas.
Me llevarían adonde
nunca he estado. Pero yo
no quiero los cielos nuevos.
Yo quiero estar donde estuve.
Contigo, volver.
¡Qué novedad tan immensa
eso, volver otra vez,
repetir lo nunca igual
de aquel asombro infinito!

Y mientras no vengas tú
yo me quedaré en la orilla
de los vuelos, de los sueños,
de las estelas, inmovíl.
Porque sé que adonde estuve
ni alas, ni ruedas, ni velas
llevan.
Todas van extraviadas.
Porque sé que adonde estuve
sólo
se va contigo, por ti.


Pedro Salinas

martes, 15 de septiembre de 2009

No es más

Un poema no es más
que una conversación en la penumbra
del horno viejo, cuando ya
todos se han ido, y cruje
afuera el hondo bosque; un poema

no es más que unas palabras
que uno ha querido, y cambian
de sitio con el tiempo, y ya
no son más que una mancha,
una esperanza indecible;

un poema no es más
que la felicidad, que una conversación
en la penumbra, que todo
cuanto se ha ido, y ya
es silencio.

Eliseo Diego

aunque..

Aunque siempre te escapas, amor mío,
eres mi presente perpetuo, ¡oh, sí!
Igual que el salto del agua:
aunque le abandona sin cesar siempre la misma agua,
él permanece siempre en el mismo sitio.


Vladimír Holan