sábado, 30 de junio de 2012

Memoria de caracolas en la brisa

Embrujo
cólera
estallido

Te regalo el mar
oye las caracolas
sumerge tu cuerpo desnudo
en mi canción
confíale tu memoria a las sirenas
Te regalo el mar
hazlo tuyo.

jueves, 28 de junio de 2012

Geografía de un recuerdo

Si cada surco de mi piel rebosa tu nombre,
Si cada pensamiento fugaz navega hasta ti,
Cómo apartar mis ojos del claro horizonte
Esperando el amanecer de tu perfil.
Porque para olvidar el roce de tus besos
Su abrazo vehemente, cálido, húmedo, tierno
Tendrían que borrar la rosada isla de mis labios
Del ajado mapa de mi cuerpo.
Porque mil ríos de heridos recuerdos
Fluyen por debajo de mi piel,
Invisibles al omnisciente firmamento.
Y contumaces, furiosos, desafiantes
Desgastan las orillas de mis sueños,
Erosionando los muros del olvido
Con el fantasma de tu anhelado regreso.
Porque aunque un abismo de despedidas
Separe nuestros lejanos universos
Sigo tendiendo puentes con volátiles palabras,
Gritando tu nombre al vacío, oyendo sólo su eco,
Lanzando mensajes de amor al mar inmenso.
Si un día oyes tu nombre
Susurrado por el viento
O hallas un jirón de mi alma
Entretejido en un verso
No te escondas, deja tan sólo
Que te acaricie un momento
Para después perderme de nuevo
Entre la niebla del tiempo.
Porque en días como hoy necesito
Todo un mundo para recordarte
Que siempre te echaré de menos.

Ana Rosetti

martes, 26 de junio de 2012

SÁBANA DE ARRIBA

Me instalé cuidadosamente doblado
entre la ropa blanca del closet
Sacaste las sábanas de tu cama
y me pusiste de sábana de arriba

Te deslizaste debajo de las tapas
y te cubrí centímetro a centímetro

Entonces fuimos barridos por el huracán
y caímos jadeando en el ojo de la tormenta

Ahora yaces bañada en transpiración
con la vista perdida en el cielo raso

y la sábana de arriba aún enredada entre las piernas.

Óscar Hahn

domingo, 24 de junio de 2012

Aire libre

Si algo me gusta, es vivir.
Ver mi cuerpo en la calle,
hablar contigo como un camarada,
mirar escaparates
y, sobre todo, sonreír de lejos
a los árboles...

También me gustan los camiones grises
y muchísimo más los elefantes.
Besar tus pechos,
echarme en tu regazo y despeinarte,
tragar agua de mar como cerveza
amarga, espumeante.

Todo lo que sea salir
de casa, estornudar de tarde en tarde,
escupir contra el cielo de los tundras
y las medallas de los similares,
salir
de esta espaciosa y triste cárcel,
aligerar los ríos y los soles,
salir, salir al aire libre, al aire

Blas de Otero

viernes, 22 de junio de 2012

Si contemplo tu cuerpo que es una luna blanca
esparcida sobre mis labios
y miro tu rostro atalaya de mis sentimientos,
siento tan cálido aliento
siento tu sangre que es lava rugiente
que todo me es ajeno y nada me pertenece.
Entonces el día y la noche se conjugan
en una lágrima oscura.
Siento estas manos, este cuerpo,
estos ojos invadidos por el cálido latido
de tu universo,
a merced de tus brazos de dulce cera
me estremezco en un profundo hueco sin latido
y el límite de la vida se precipita
ante mí,
ciñéndome la cintura
y es tu fulgor palabra absoluta
y es tu sangre mi eterno minuto.


INÉS MONTES

miércoles, 20 de junio de 2012

Ciclo

Dieciocho noches besándose

en el centro de mi estómago.

La sábana se estremece polisílaba,

debajo sacude la arena y arruga las palabras

con su látigo de tinta pura azul.

Es una furia

chocando con la fiebre.


ELENA MEDEL

lunes, 18 de junio de 2012

Pido lo imposible

Pido lo imposible: ámame para siempre.
Cuando se extinga el deseo todo, ámame.
Ámame con la firme obstinación de un monje.
Cuando el mundo entero
y todo lo que estimes sagrado te advierta
contra ello: ámame aún más.
Cuando una furia innombrable te sobrecoja: ámame.
Cuando cada paso de tu puerta a tu empleo te canse…
ámame; y de tu empleo a tu hogar de nuevo, ámame, ámame.
Ámame cuando estés hastiado…
Cuando cada mujer que veas sea más bella que la última,
o más triste, ámame como siempre lo has hecho:
no como un admirador o como un juez, sino
con la compasión que reservas para ti mismo
en tu desamparo.
Ámame como te deleitas de la soledad,
la anticipación de tu muerte,
los misterios de la carne, sus desgarros y enmiendos.
Ámame como al más venerado recuerdo de tu infancia…
y si no hay uno en tu memoria…
imagínalo, y déjame habitarlo contigo.
Ámame marchita como me amaste plena.
Ámame como si Yo fuese para siempre…
y yo, haré de lo imposible
un simple acto,
amándote, amándote como te amo.

Ana Castillo

sábado, 16 de junio de 2012

LA IDENTITAT/ LA IDENTIDAD


De nit, entre les teves mans, sóc dúctil

com una gota de mercuri. Vull

relliscar i trencar-me en mil miralls, mil

petites esferes d'aigua densa on

puguis abocar-te a contemplar el teu

rostre, i interrogar-te des de mi.



___________________________________

De noche, entre tus manos, soy dúctil

como una gota de mercurio. Quiero

resbalar y romperme en mil espejos, mil

pequeñas esferas de agua densa donde

puedas arrojarte a contemplar tu

rostro, e interrogarte desde mí.

jueves, 14 de junio de 2012

Mi búsqueda

I
Yo trato de alcanzarte
y solo beso el aire
Hombre mío
por ir detrás de ti
he descubierto el sur en cada estrella.
Me gustas por tu porte,
por esa larga línea de tu espalda
en donde yo me quedo
soñando como un pájaro de otoño.

Violeta Luna

martes, 12 de junio de 2012

Si supieras

Si supieras,
si sólo una milésima,
si sólo un pedacito,
un lado de mí misma conocieras
sabrías que estoy hecha de ciruelas,
de almendras y duraznos.
Sabrías que por dentro soy de azúcar, que sólo un dedo tuyo
y un término rosado es suficiente
para que pierda mi alma el equilibrio.
Una mirada sola,
clarísima y brillante,
un simple yo te quiero
podrían encender mi vieja lámpara
y hacer que tras la tarde
se moje de pasión alguna orquídea.
Si supieras
que sólo soy de vientos primitivos,
de aquellos que hacen fuego
y avivan las fogatas campesinas.
Si sólo una milésima,
un lado de mí misma conocieras
sabrías que estoy hecha de aceitunas,
de abejas y geranios,
sabrías que la noche es mi cuaderno
con un redondo verso que es la luna.
Sabrías que por dentro tengo cítaras,
que sólo una caricia
podría convertirme en oleaje,
en lluvia de amapolas y campanas.
Si supieras
que estoy de ti tan llena
que sólo bastaría que te acerques
para nacer de nuevo.
No sabes que soy frágil,
que sólo soy de piel ansiosa y húmeda
que sólo soy mujer,
así sencillamente,
sin rótulos ni farsas, tan sólo soy así:
aquella que te espera contra todo.

Violeta Luna

lunes, 11 de junio de 2012

IMITACIÓN A NARCISO I

El amor está en el pubis,
en los dedos que acarician la floresta
y el estrecho espacio de tu carne palpitando
en las mismas caricias.
Desde la tristeza viene el amor
lleno de sal y saliva
como este dedo que baja
y sube
en el deslizante espacio de tu carne.
El amor siempre ha sido cueva, árbol,
follaje,
penetrando hasta las raíces mismas
del gusano,
allí donde el amor se derrumba
en sus propios huesos,
como una explosión de carne
dentro de la carne.
Abrazamos el amor
en imaginados besos y abrazos
para caer y no caer
blandamente en el abismo agitándose
en el viento.
Como el poeta en la página
acaricia la palabra muslo,
labio,
clítoris (que faltaba en estos versos),
cree el hombre tocar a la mujer
y la mujer al hombre,
como el poeta al poema,
y cada cual se besa a sí mismo
en los labios del otro,
cada cual se roza a sí mismo
en la piel del otro que ama
la imagen creada por sus propios ojos.
Así como el poeta se ama a sí mismo en el poema
y en la superficie de la letra,
así el hombre, la mujer
acarician el propio sueño imaginado en sus ojos
y cada uno ama el amor
que para sí mismo ha creado
en su propio espejo.

Mario García


sábado, 9 de junio de 2012

RECUÉRDAME, DESNUDA

¿En qué bar estarás
donde tu risa
suene más que la música?
¿Dónde tu pelo sea
el rincón más oscuro de la fiesta
y tú escote
la ventana mejor iluminada?

Alguien sabrá que eres impredecible
de la cintura para abajo,
hacia arriba te salva la sonrisa
y esa mirada ausente
como si no quisieras compañía.

¿A quién decidiste seducir?
¿Algo tiene de mí
tu próxima aventura?

Recuérdame, desnuda
y no olvides
que nadie sabe más de tu cuerpo
que mis manos.
Miguel Méndez Camacho

jueves, 7 de junio de 2012

Deseo

Ayúdame.
Estoy
ciega.
Mi sed
me ciega.
Cúbreme.
Estoy desnuda.
Abre
las puertas
de mi reino.
Esclavo mío,
asume
tu importancia,
dame
tu ley.

Exijo
tu fuerza.
¡Ámame!

La tierra,
el viento,
el fuego,
el mar
con su oleaje....
¿Qué importa,
di,
qué importa?
Me bebo el Universo
en tus labios,
amante.


Susana March

martes, 5 de junio de 2012

Sin título

Para tus deseos
mis pechos fueron las suaves colinas
en el horizonte
y mi boca el pozo del agua.
Para ti,
estuve siempre como un fruto
en el secreto
huerto particular de los sábados
y de las noches robadas
a los días de semana.
Cuando deseaste cubrirme
tu cuerpo fue mi vestido,
fue mi sábana,
fue mi casa.
Para tus deseos de morir
fui la muerte
y para tus deseos de vivir,
fui la vida.

Para tus deseos de música
te regalé una suave queja,
un fuerte grito,
una risa.
Para tus deseos de lluvia
te mojé con mis lágrimas y mis sudores…
apagué tu incendio
entre flujos o salivas,
apagué tus ganas en mis ganas.

Para tus deseos de dormir
como un niño pequeño,
te quedaste durmiendo sobre mi carne
y yo pasé mis manos por tu cabeza
y yo pasé mis manos por tu espalda
y tú te quedaste pequeño,
para siempre,
para tus deseos,
adentro de mi pecho
y adentro de mi historia.

Roxana Beatriz López Serrano

domingo, 3 de junio de 2012

Voy a arraigar en ti

Voy a a arraigar en ti. Mis fuerzas más oscuras
remueven lentamente la tierra de tu alma.
Quisiera penetrarte y enraizar mi esencia
sobre la carne viva que nutre tu fervor.

Ahondaré en ti mismo y abrasará tu sangre
el fuego de la mía rebelde y soñadora.
Invadido por mí, derribarás la cumbre
que te aleja del cielo.

¿No sientes mis raíces? Tu tallo florecido,
ebrio de sí, eterniza mi cálida fragancia.
¡Irguiéndolo alzarás la copa de mi frente,
hasta volcar su zumo en los labios del sol!

Ernestina de Champourcín

viernes, 1 de junio de 2012

Amor oscuro


Si para ti fui sombra
cuando cubrí tu cuerpo,
si cuando te besaba
mis ojos eran ciegos,
sigamos siendo noche,
como la noche inmensos,
con nuestro amor oscuro,
sin límites, eterno...
Porque a la luz del día
nuestro amor es pequeño.

Manuel Altolaguirre