El conjunto de miembros hermosos o la
voz
tan dócil que desgarra y hace sangre,
el catálogo ameno de los gestos,
la increíble, la cruel sonrisa, la manera
de deslizar las manos, la deseable rodilla.
Ése que muestras no es el que yo quiero.
Te he recreado, otro, a mi capricho,
más invisible y menos complicado,
y te he inventado casa y nombre propios,
secretísimo mío, para poder hallarte.
Qué bello te despiertas conmigo en la alborada;
si tú pudieras verte…
tan dócil que desgarra y hace sangre,
el catálogo ameno de los gestos,
la increíble, la cruel sonrisa, la manera
de deslizar las manos, la deseable rodilla.
Ése que muestras no es el que yo quiero.
Te he recreado, otro, a mi capricho,
más invisible y menos complicado,
y te he inventado casa y nombre propios,
secretísimo mío, para poder hallarte.
Qué bello te despiertas conmigo en la alborada;
si tú pudieras verte…
Josefa Parra