sábado, 23 de enero de 2021

Algo más

 Para mí nunca nada es suficiente.

Me da igual que me cantes serenatas

o que conquistes ciudades en regiones

bárbaras bajo mi estandarte

o que lleves mi estandarte a Mercurio o a Urano.

Incluso aunque lo clavaras

en el cabecero de tu cama,

seguiría pareciéndome insuficiente.

 

Y haces bien en no regalarme flores.

Haces bien, porque ni las magnolias

ni los claveles ni los tulipanes,

ni siquiera las rosas negras,

me conmueven lo más mínimo

ni me parecen una honda declaración.

 

Ni siquiera los chocolates.

Ni siquiera las noches

en que te muestras elocuente.

Gata Cattana