Desnúdame.
Dibuja mis formas de mujer.
Envuélveme,
escóndeme con ropas de colores,
con generosos dorados.
Haz de mi el mejor paisaje.
Déjame hacerte creer que duermo
para que puedas despertarme.
A mí, que soy de verdad,
rodéame de sueños,
vísteme con mis cabellos,
con brillos de pasión estética y descarada.
Barnízame de deseo,
siente mi piel mirándome.
Mírame,
que me dejo;
como en un cuadro de Gustav Klimt.
Teresa Colom