No sé cuando nos conocimos,
quizás era septiembre…
No suelo anotar fechas.
Tú eras hombre y yo era
una mujer apenas,
y despertaste cosas
dormidas en mi mente
desde hace mucho tiempo.
Y recordé de nuevo
cómo son las sonrisas,
cómo son los poemas
y cómo es la ternura;
Cómo dormir con alguien
tan lejos y tan cerca.
Llenaste mi cabeza
de canciones y cuentos.
Y cubriste mi cuerpo
con besos invisibles.
No sé cuando te conocí,
no apunto fechas.
Qizás era septiembre...