viernes, 6 de julio de 2012

TE TENGO TODO MARCADO

Como un yacimiento arqueológico.
No es extraer los restos de ti lo que persigo
–ruinas de una ciudad tallada en la arenisca–
lo que quiero es penetrarte
–taladrar la piedra de tu cuerpo–
y este sexo cóncavo de mujer
se vuelve inútil para mi deseo.

Cavo en tu ombligo
para entrar por el flujo de tu sangre.
Vacío mi espíritu como aire en tu boca
y con ojos acuosos te veo respirarme.
Ya se que no necesito de piel para tocarte
no es eso
yo quiero hacerme una cueva en tu cuerpo.


Flexiono tus rodillas bajo mis axilas
como los brazos de un taladro.
–Las aceras que rompo
son las de tu calle–.
Con mis pestañas barro
el polvo que levanto de tu frente
y no me detengo hasta que soy tú
y tu sexo es el mío hasta que soy yo
quien está dentro.

Miriam Reyes