Tu cuerpo se tiende
sobre el mío
para que ninguna otra
razón exista.
Tu cuerpo consume y rinde
sobre mi cuerpo
las manos de artista, la
senda de los pájaros.
La noche llega, navego
danzando,
riéndome de placer,
abierta al tiempo detenido
bajo el carnaval de tu
cuerpo.
Etnairis Rivera