Arrancaré la tierra a dentelladas para llegar a ti.
Esperaré.
Dejaré que el sol salga mil veces
y que otras mil se ponga,
que los días destierren la juventud que queda,
que el tiempo me haga vieja
-también tú te harás vieja-
Esperaré mil años, te seguiré de lejos,
recorreré tu calle, me instalaré en tu acera,
esperaré que salgas y me veas,
recogeré tu odio si me odias, tu desprecio,
sobreviviré a tu indiferencia.
(Mientras tú me ignoras yo trabajo
para hacer mío el mundo en el que habitas)
Te vi y te amé, ¿qué más puedo decir?
Esperaré, te dije, y así ha sido.
Aun estoy aquí, siempre, esperando.Beatriz Gimeno