Te amo porque tus labios
saben a claveles y magnolias,
tu espalda a frescas hojas,
tu pecho a trino de gorriones,
tus piernas a rojo sauce,
tu sexo a enjambre de abejas.
Porque tu cuerpo es fuego de artificios
que explota en horizonte nuevo,
se inundan mis entrañas de sonidos.
Los jugos de mi almendra
a incienso de violetas huelen.
En tus dedos, infinita noria soy.
Me acaricias con ternura de algodones,
colmas mi vientre con frutos esmeraldas.
Porque eres curva perfecta
que se amolda a mi cuerpo,
conviertes en jardín mi corazón en llamas.