Me disuelvo
en la magia
giro
en medio del
fruto
pulposo
oigo
el suave ruido
de la brasa
encendida
el lenguaje húmedo
anclado en la boca.
Un
tambor anuncia
tu pulso
tu obscuro río.
Cerrados
los ojos
te miro
me miro
honda ceniza soy
ahora
Carmen Matute